De repente me pregunto.. cómo sería la vida sin mí, cómo serían las cosas. Ahora me gusta mi presente, ahora después de haber esperado mucho tiempo, pero me hubiese gustado esperar un poco más, porque pareciera que estoy en un período de fragilidad, de inestabilidad, de juventud.
Suele pasar a veces que, por pasar mucho tiempo adormecida, los ojos se cegan ante la luz de un sol que nunca antes habías visto. Qué sucederá cuando mis ojos se acostumbren a ese sol, qué pasará cuando desee oscurecerme de nuevo.. qué pasará.. Y me gustaría asegurar muchas cosas, pero me da miedo, porque así como dejé mis clases de piano por encontrarme en aprietos, podría llegar a dejar las cosas que más quiero.. Me da miedo el futuro, porque quiero muchas cosas que se construyen o deshacen con el tiempo. Quisiera estudiar artes, sicología y culinaria.. quisiera que dedicar más tiempo a mi perro, quisiera poder expresar más amor a mi padre, quisiera ser más constante con mis quehaceres, quisiera poder estar a tiempo a toda hora, quisiera poder terminar todo o que dejé inacabado, quisiera poder tiempo de sobra y al mismo tiempo tener todo copado...
quisiera tener miles de tiempos paralelos para hacer todo esto y además poder estar con la persona que amo.
Odio que por faltarme tiempo no pueda ir a un lugar amplio a practicar voley, porque como me adormezco en la cancha me miran con cara de rabia, me miran con desprecio, porque hay una esquina que falla.. entonces me tapan, me cubren y no porque quieran defenderme sino porque estoy fallando.
Dónde está la puta tolerancia, dónde está la solidaridad de equipo... no hay equipo ni aquí, ni allá ni en mi casa... pasa que la luz me cegó tanto que olvidé lo que en la oscuridad me estaba carcomiendo.. y ahora que mis ojos se acostumbran a la luz del día, veo de nuevo la repugnancia que me provocaba la vida...
Con gente que se inmisculle como puede para cagarle la vida al otro, mujeres sarnosas tratando de provocar no sé que cosa en la vida de otro, perras en celo, malditas perras en celo y malditos perros también, que no son capaces de aguantarse su calentura. Maldito el pasado... maldito el presente que me hace recordar, malditas injusticias y malditos atropellos.. malnacidos todos aquellos que se consumen en la porquería, malditos porque no saben encontrar la verdadera paz en su alma..