Sucede algo mortal.

Me inyecté a la vena música prendida,

hielo a la piel para congelar el corazón,

me quise convertir en la mujer andrógena que en esencia quisiera algún día llegar ser.

Ésta es la cuestión: me volví vacía y es tiempo de volver a la cápsula.

Soy una MINA y me estoy volviendo TONTA...

Ojalá aprenda alguna cosa con todo este revoltijo, adiós.